Resumen de Conferencia de Doña María José Olea Renovales.
Colaboradora del Dr. Prieto Aguirre.
Considerar la vejez como algo degradante, incluso como una enfermedad es un error. Actualmente se la entiende como una etapa más del proceso de cambio que se desarrolla en el ámbito biofisiológico y en las esferas psíquica y social. Por todo ello, estos últimos años pueden ser tanto o más felices, satisfactorios y útiles, todo depende del talante con que cada cual haga frente a las vicisitudes que acontezcan y que se producen en cualquier edad.
Hay que aceptar, como afirmaba Hall, que cada edad tiene sus propios modos y maneras de sentir, pensar y querer, y que difieren de una personas a otras, pero los últimos años de una persona pueden y deben ser felices, satisfactorios y útiles. Nos consta que esto entraña sus dificultades en algunas ocasiones, pero no por ello hay que desistir, muy al contrario, hay que aprender a hacerles frente. Hay que aprender a envejecer.¿Cómo? Aprendiendo como se aprenden otras cosas, Hay que aprender a:
1.- A realizar una prevención higiénico-sanitaria para conservar la salud lo mejor y más tiempo posible. Si se presentara déficit o incapacidades aprender a hacerles frente.
2.- A mantenerse activo física y mentalmente, aunque laboralmente se esté jubilado. (Andando, leyendo, jugando...). De igual manera que se pierde agilidad y se produce un agarrotamiento si no se hace ejercicio físico, si no se ejercita la mente se pierde interés por todo lo que está alrededor, y se llega a una decadencia por pereza mental que incluso puede desembocar en una depresión.
3.- A tomar conciencia del papel que desempeña dentro de la sociedad, que es muy valioso y de peso. Constituyendo lo que se ha dado en llamar "el poder gris'', que pueden influir decisivamente, estando organizados de forma eficaz, y poder cambiar aspectos negativos que la sociedad manifiesta hacia los mayores.
La sociedad se ha visto desbordada por la cantidad de "viejos" que ha creado y los encasilla, en palabras de Confort, como "obtusos, inservibles para cualquier trabajo, medio
locos y asexuados. Este autor, y algunos más, consideran a los viejos como personas que han vivido muchos años pero que ya son personas inútiles. Tenemos que luchar contra este encasillamiento de que todos somos inútiles..
4.- A relacionarse con personas más jóvenes, de las que usted puede aprender, pero a los que con seguridad puede enseñar.
5.- A considerarse un adulto pleno, con derecho a una vida íntima satisfactoria, sabiendo que la sexualidad no es perversa ni demencial cuando es adecuada y cumple un amplio campo de finalidades no reproductivas.
6.- A mantener interés por los acontecimientos de actualidad.
7.- A prestar ayuda a los demás.
8.- A pedir ayuda, si la necesita, a familiares o amigos, y no tratar de solucionar los problemas solo o evadirlos.
9.- A mantener una actitud abierta ante la vida y cambiar su estilo si fuera necesario. Acepte y disfrute oportunidades y experiencias nuevas. (Excursiones, amistades, reuniones...)
Utilización del tiempo libre: La sociedad actual está intentando imponer una pedagogía para el uso del tiempo libre en los distintos períodos de la vida, y con mayor énfasis actualmente en la vejez . Es un intento de sustituir la cultura del trabajo por la del ocio. Todo puede ir bien mientras el ocio sea un ocio provechoso para quien lo disfruta, pero puede tornarse en inútil y estéril si no se hace algo provechoso para sí o para los demás.